Ay Muerte!
tristeza infinita!
angustia negra!
No te veía desde los tiempos de tertulias
en taperas y cementerios.
Mas de uno quedaría seco de un soponcio en tu presencia.
Si hasta yo desperté sudado.
No soy tu mensajero pero a un amigo siempre se le hace un favor.
Has venido solo para decirme
que recuerde a los vivos
que nadie ha hallado jamas tan bella a la vida
ni tan luminosa, ni tan deseable, ni tan placentera
como aquel que ha sentido tu mano sobre su hombro.
Amigo, que paradójico!.
Hoy recordé cuanto amo a los míos.
solo porque pasaste a saludar.
tristeza infinita!
angustia negra!
No te veía desde los tiempos de tertulias
en taperas y cementerios.
Mas de uno quedaría seco de un soponcio en tu presencia.
Si hasta yo desperté sudado.
No soy tu mensajero pero a un amigo siempre se le hace un favor.
Has venido solo para decirme
que recuerde a los vivos
que nadie ha hallado jamas tan bella a la vida
ni tan luminosa, ni tan deseable, ni tan placentera
como aquel que ha sentido tu mano sobre su hombro.
Amigo, que paradójico!.
Hoy recordé cuanto amo a los míos.
solo porque pasaste a saludar.